Soberanía Alimentaria

“Soberanía Alimentaria es el derecho de los pueblos a alimentos nutritivos y culturalmente adecuados, accesibles, producidos de forma sostenible y ecológica, y su derecho a decidir su propio sistema alimentario y productivo. Esto pone a aquellos que producen, distribuyen y consumen alimentos en el corazón de los sistemas y políticas alimentarias, por encima de las exigencias de los mercados y de las empresas. Defiende los intereses de, e incluye a, las futuras generaciones. Ofrece una estrategia para hacer frente al comercio libre y corporativo y para encauzar los sistemas alimentarios, agrícolas, pastoriles y pesqueros para que pasen a estar gestionados por los productores y productoras locales. La soberanía alimentaria da prioridad a las economías locales y a los mercados locales y nacionales, y otorga el poder a los campesinos y a la agricultura familiar, la pesca artesanal y el pastoreo tradicional, y coloca la producción alimentaria, la distribución y el consumo sobre la base de la sostenibilidad medioambiental, social y económica. La soberanía alimentaria promueve el comercio transparente, que garantiza ingresos dignos para todos los pueblos, y los derechos de los consumidores y consumidoras a controlar su propia alimentación y nutrición. Garantiza que los derechos de acceso y gestión de la tierra, de los territorios, del agua, las semillas, el ganado y la biodiversidad, estén en manos de aquellos que producen los alimentos. La soberanía alimentaría supone nuevas relaciones sociales libres de opresión y desigualdades entre los hombres y mujeres, pueblos, grupos raciales, clases sociales y generaciones.”

Declaración de Nyeleni, Foro Internacional por la Soberanía Alimentaria, Mali, 2007.

www.viacampesina.org

miércoles, 24 de marzo de 2010

Agricultores, ecologistas y consumidores denuncian en el Parlamento Europeo los impactos socioeconómicos de los transgénicos en España


- El análisis de casos concretos de agricultores ecológicos contaminados por OMG desvela unas pérdidas de hasta 26.000 euros/campaña *

Madrid/Bruselas, 24 marzo 2010. Esta mañana, representantes de Amigos de la Tierra, Greenpeace, la Coordinadora de Organizaciones de Agricultores y Ganaderos (COAG), la Confederación de Consumidores y Usuarios (CECU) y la Coordinadora Europea Vía Campesina han presentado en el Parlamento Europeo un informe sobre los impactos socioeconómicos de los transgénicos en España [1]. Actualmente, se discute a nivel europeo la evaluación de estos impactos antes de aprobar un cultivo transgénico. España es el único país de la UE que cultiva transgénicos a gran escala, y la desastrosa situación de contaminación generalizada y absoluta falta de transparencia y control debe ser considerada a la hora de valorar el cultivo de transgénicos en Europa.

El Consejo de Ministros de Medio Ambiente de la UE aprobó en Diciembre de 2008 considerar los impactos socioeconómicos a la hora de evaluar la aprobación de un cultivo transgénico. Actualmente, tras consultas a los Estados Miembro sobre su experiencia sobre el tema, está en discusión en Bruselas y habrá una propuesta en Junio. El Gobierno Español aporta una visión completamente distorsionada de la realidad sobre estos impactos. Por ejemplo negando en público, aunque reconociendo en privado, los casos de contaminación por transgénicos. Por ello, las organizaciones han preparado un completo documento con todas las referencias disponibles sobre la auténtica situación en el Estado Español, denunciando también la enorme dificultad y oscurantismo existente para obtener datos sobre estos impactos.

Algunas de las características que definen la experiencia del cultivo de transgénicos en España en este ámbito son:

- La pérdida del mercado de maíz ecológico por contaminación transgénica, lo que supone la desaparición del sector del maíz ecológico y una enorme dificultad de producir incluso maíz convencional en determinadas zonas.

- Daños a iniciativas sociales, al desarrollo rural y a otros sectores, como el sector de la producción y compra de cereales de cultivo ecológico, la transformación en harinas y la elaboración de productos de panadería.

- La pérdida de mercado de gluten de maíz convencional por contaminación por transgénicos y venta a menor precio para piensos animales;

- La pérdida de piensos ecológicos al estar contaminados por transgénicos y el coste de reemplazarlos por piensos no contaminados;

- La subida de precios de los piensos ecológicos para ganadería ecológica debido tanto al sobre coste de adquirir maíz ecológico no contaminado como a la subida del precio de elementos alternativos.

- El alto coste de los análisis para asegurar la no presencia de transgénicos, que asumen los agricultores que no los cultivan.

- La contaminación de las semillas no transgénicas.

- La contaminación generalizada por transgénicos de los alimentos a la venta en supermercados que contienen soja o maíz, incluyendo leches infantiles, papillas o galletas.

- La imposibilidad de establecer seguros agrarios que cubran los daños producidos por los transgénicos

Frente a la situación que se vive con los transgénicos, la sociedad española se movilizará durante el mes de abril, incluyendo una manifestación estatal el próximo 17 de abril en Madrid contra la política del ministerio del Medio Ambiente, Rural y Marino [2].

Notas:

[1] El documento en español está disponible en: http://www.coag.org/rep_ficheros_web/6cb3c46ad43fe6b7c8aea5ed07637d75.pdf

[2] La convocatoria y un calendario de movilizaciones está disponible en:

http://noquierotransgenicos.wordpress.com/

*Ver caso de July Bergé, agricultor de Bellcaire de Urgell, en página 16 del informe.

No hay comentarios:

Publicar un comentario